De buena y malas intenciones

Qué día! En serio, qué día tan increíble el mio!

Hoy no quepo en mi, empapada y cansada con los pies adoloridos me siento tan pero tan feliz, espero que todos justo ahora puedan tener una felicidad como la mía.

Lo vuelvo a corroborar, soy feliz haciendo música y fotografía sin esperar nada a cambio. Es la emoción de sentir vibrar mi corazón junto al alma del cello, o poder capturar en mi lente la fotografía perfecta.

Siempre me dará pena que digan mi nombre en un micrófono, aun si fuera para recibir buenas intenciones. El proyecto que estoy realizando con mis profesores no es para yo obtener méritos algunos. Sino es mi forma de devolver todo el amor que yo he recibido de la Escuela de Música Augusto Brandt, por el apoyo y las enseñanzas, por sanar mis heridas y devolverme mi música.

Siempre habrá un mal comentario que intente arruinarte el día, siempre habrá alguien a quien no le agrademos pero no somos monedita de oro para caerle bien a todo el mundo. Y no debemos permitir que eso no desanime, ni nos haga sentir que no merecemos estar donde estamos, ni ser felices.

Porque si estamos allí es por una razón, y en este caso, si yo estaba allí era porque debía también tocar alli.

Y la mejor respuesta para hoy es " El amor que he dado y el que recibí, eso es lo que queda, eso hablara por mi"  Amaral - Bien alta la mirada. 

La cereza de mi pastel fue un buen día con mama y habernos encontrado con tantas personas queridas.

Nota mental - Debo escuchar mas música con mi mama